Santiago Avendaño lenguaraz de los ranqueles y cronista de un discurso constituyente
Díez, Beatriz
Santiago Avendaño lenguaraz de los ranqueles y cronista de un discurso constituyente CD-ROM - Buenos Aires Colegio de Traductores Públicos de la Ciudad de Buenos AiresCTPCBA 2011 - p. 439-447
incl. ref.
Santiago Avendaño (1834-1874), lenguaraz entre el gobierno argentino y las tribus pampas, fue sensible a estos discursos y prácticas del grupo humano con el que trabajó. Tenía, para ser intérprete, la formación ideal, aunque no fuera ideal la situación de adquisición: había crecido entre los indios ranqueles desde los siete hasta los catorce años (1842-1848), pero como cautivo. La suerte de haber ganado el afecto del cacique Caniú, sumado a un temperamento práctico y observador, y una evidente apetencia cognoscitiva, cambiaron el signo de ese cautiverio. A tal punto que tres años después de su huida de la toldería, luego de una corta formación escolar y otro año de cautiverio bajo Rosas, emprendió, munido de un diploma de "intérprete de la provincia", la tarea de mensajero verbal y lenguaraz entre indios y cristianos, que cumplirá toda su vida. A partir de 1872, Avendaño desempeñó además, el cargo de "Intendente de los Indios". Ejerciéndolo, defendió con decisión los derechos de los ranqueles y logró contener sus ataques a las poblaciones blancas.
978-987-1763-02-3
ARGENTINA
HISTORIA
HISTORIA DE LA INTERPRETACIÓN
RANQUEL-ESPANOL
SIGLO XVIII ABORIGENES AMERICANOS
061.3 : 81'25 CTPCBA 2011
Santiago Avendaño lenguaraz de los ranqueles y cronista de un discurso constituyente CD-ROM - Buenos Aires Colegio de Traductores Públicos de la Ciudad de Buenos AiresCTPCBA 2011 - p. 439-447
incl. ref.
Santiago Avendaño (1834-1874), lenguaraz entre el gobierno argentino y las tribus pampas, fue sensible a estos discursos y prácticas del grupo humano con el que trabajó. Tenía, para ser intérprete, la formación ideal, aunque no fuera ideal la situación de adquisición: había crecido entre los indios ranqueles desde los siete hasta los catorce años (1842-1848), pero como cautivo. La suerte de haber ganado el afecto del cacique Caniú, sumado a un temperamento práctico y observador, y una evidente apetencia cognoscitiva, cambiaron el signo de ese cautiverio. A tal punto que tres años después de su huida de la toldería, luego de una corta formación escolar y otro año de cautiverio bajo Rosas, emprendió, munido de un diploma de "intérprete de la provincia", la tarea de mensajero verbal y lenguaraz entre indios y cristianos, que cumplirá toda su vida. A partir de 1872, Avendaño desempeñó además, el cargo de "Intendente de los Indios". Ejerciéndolo, defendió con decisión los derechos de los ranqueles y logró contener sus ataques a las poblaciones blancas.
978-987-1763-02-3
ARGENTINA
HISTORIA
HISTORIA DE LA INTERPRETACIÓN
RANQUEL-ESPANOL
SIGLO XVIII ABORIGENES AMERICANOS
061.3 : 81'25 CTPCBA 2011